Cuernavaca, Morelos a 7 de abril de 2010
DIP. JORGE ARIZMENDI GARCÍA
Presidente de la Junta Política y de Gobierno
del Congreso del Estado de Morelos
P r e s e n t e
Recibe un respetuoso saludo, me permito distraer tu atención, con el propósito de realizar algunas reflexiones en torno a que ha circulado en los medios de comunicación morelenses la intención de los Diputados Integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional de cobrar los gastos generados con motivo del traslado, comida y hospedajes durante su estancia en Zapopan Jalisco los días 4 y 5 de marzo, debido al festejo del 81 aniversario del Partido Revolucionario Institucional, convocado por el Comité Ejecutivo Nacional priísta.
Al respecto considero necesario recordar lo que al inicio de la LI Legislatura compartí con algunos diputados priístas, la importancia y relevancia que debía significar el contar con la mayoría al interior del Congreso del Estado en la conformación de la nueva legislatura, la responsabilidad que simboliza la expectativa ciudadana de generar correlación distinta en el poder legislativo para reconducir la política del Estado y generar los cambios requeridos para tener mejores condiciones de vida de los morelenses. Y en su momento, compartí, la diferencia entre la legitimidad de origen y la legitimidad de ejercicio, reconociendo sin duda alguna, que el grupo parlamentario del PRI en Morelos, contaba ya con la primera, la de origen porque esa legitimidad la otorgaron las urnas en el proceso electoral de julio, la ciudadanía decidió apostar en ese momento por el PRI y sus candidatos, depositó con esperanza, expectativa, ilusión, anhelo –y lo que queramos agregar- su confianza en la opción que representaron los candidatos del partido tricolor.
Pero la historia no termina ahí, vendría el gran reto de construir día con día la LEGITIMIDAD DE EJERCICIO, la de adeveras, la que puede constatarse en cada acción, cada palabra, cada medida política, cada iniciativa, cada actitud de los legisladores, y que difícil y extenuante hay que reconocer nos ha resultado traducir la legitimidad de ejercicio para los que somos representantes del pueblo de Morelos, en acciones que la ciudadanía a quien representamos pueda percibir como actitudes congruentes y consecuentes.
En su momento, manifesté mi desacuerdo por su decisión de ausentarse cuando había una sesión ordinaria del pleno programada, a pesar de que nuestra normatividad interna señala con puntualidad que las actividades partidistas no serán causa justificada para faltar a las sesiones, ante ello, es fácil en la condición de mayoría cambiar el día de la sesión.
Y se pueden señalar todos los beneficios y bondades obtenidos de la participación de los diputados priístas en el festejo nacional por el aniversario de su partido, no tengo porque poner en duda, es su derecho, tenemos también como autoridades y representantes emanados de las filas de un partido político cual sea, ciertos derechos y obligaciones, el no desvincularnos, y apegar nuestra actuación a los principios, programa de acción, y base ideológica del partido al que pertenecemos, es parte también de nuestra responsabilidad.
La situación es tener claridad en el momento, saber cuándo debemos dar prioridad a nuestra función que debe estar al servicio de la sociedad y para abonar a la funcionalidad que representa el Congreso del Estado como Institución, y cuándo debemos ponderar nuestra actividad político-partidista, y en ello sustentaba yo la crítica realizada en los primeros días del mes de marzo pasado.
Considero que el evento, no debía llamar más la atención, porque al final la sesión reprogramada finalmente se desarrolló, se desahogaron los puntos del orden del día y no habría pasado a más, de no ser por lo que al inicio del mi reflexión se señaló, la gestión que se realiza para el reembolso de los gastos efectuados por los diputados priístas en su viaje a Zapopan Jalisco con motivo del festejo por el 81 aniversario de su partido político.
No dudo en absoluto de la importancia que significó su asistencia al encuentro nacional en su calidad de representantes del pueblo de Morelos emanados del PRI, pero, les preguntaría sin buscar confrontación alguna, ¿No es acaso un EXCESO solicitar, pedir, exigir el financiamiento del recurso púbico que administra este Congreso para cubrir los gastos referidos? ¿No parecería el colmo a la ciudadanía en una condición crítica económicamente, el que se destinen cientos de miles de pesos que debían tener otro destino, para financiar sus actividades partidistas? Son algunas preguntas.
De verdad, podría considerarse justo erogar la cantidad que ha sido solicitada, sin pensar en que estamos llamados y en consecuencia debíamos estar OBLIGADOS a ejercer nuestra posición con estricta austeridad y medianía, en respuesta a todos los votos depositados en el proceso electoral de julio pasado, en correspondencia con la confianza puesta en manos para actuar responsablemente.
Y también hay que tener claridad, y la tengo, el monto solicitado podría con relativa facilidad ser aprobado, otorgado, cobrado, por los legisladores que demandan el pago. Claro, que el tener la condición de mayoría que el PRI ostenta, tiene sus naturales ventajas, la concesión de ciertos beneficios con la anuencia u omisión de otros, lo es sin duda, pero mi llamado Diputado Coordinador, es respetuosamente a ejercer la conducción desde la Junta Política y de Gobierno de manera responsable, de mayoría priísta consecuente con las necesidades y prioridades del pueblo al que decimos representar, por ello también el exhorto a revisar, de manera eficiente, eficaz, objetiva y transparente, el rubro que se destina a los gastos de representación para que como legisladores morelenses acudamos a actividades legislativas convocadas para el buen trabajo en las comisiones que integramos.
Como poder legislativo que somos, poder revisor de la administración de los recursos públicos de los otros, estamos doblemente obligados a realizar un manejo responsable y transparente de los recursos del erario público que nos corresponde ejercer, y conviene recordar, esos recursos se componen en su gran mayoría por los impuestos pagados por la ciudadanía, seamos pues, no solo un ejemplo sino un buen ejemplo para estar en condiciones de exigir el manejo responsable del dinero público a los otros.
Sin otro particular, agradezco la atención prestada reiterando mi respeto.
C o r d i a l m e n t e
Dip. HORTENCIA FIGUEROA PERALTA
Integrante del Grupo Parlamentario
del Partido de la Revolución Democrática
c.c.p. Diputados integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional.- para su conocimiento.
c.c.p. Diputados integrantes de la Junta Política y de Gobierno del Congreso del Edo. de Morelos.- para su conocimiento.
c.c.p. Archivo.
DIP. JORGE ARIZMENDI GARCÍA
Presidente de la Junta Política y de Gobierno
del Congreso del Estado de Morelos
P r e s e n t e
Recibe un respetuoso saludo, me permito distraer tu atención, con el propósito de realizar algunas reflexiones en torno a que ha circulado en los medios de comunicación morelenses la intención de los Diputados Integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional de cobrar los gastos generados con motivo del traslado, comida y hospedajes durante su estancia en Zapopan Jalisco los días 4 y 5 de marzo, debido al festejo del 81 aniversario del Partido Revolucionario Institucional, convocado por el Comité Ejecutivo Nacional priísta.
Al respecto considero necesario recordar lo que al inicio de la LI Legislatura compartí con algunos diputados priístas, la importancia y relevancia que debía significar el contar con la mayoría al interior del Congreso del Estado en la conformación de la nueva legislatura, la responsabilidad que simboliza la expectativa ciudadana de generar correlación distinta en el poder legislativo para reconducir la política del Estado y generar los cambios requeridos para tener mejores condiciones de vida de los morelenses. Y en su momento, compartí, la diferencia entre la legitimidad de origen y la legitimidad de ejercicio, reconociendo sin duda alguna, que el grupo parlamentario del PRI en Morelos, contaba ya con la primera, la de origen porque esa legitimidad la otorgaron las urnas en el proceso electoral de julio, la ciudadanía decidió apostar en ese momento por el PRI y sus candidatos, depositó con esperanza, expectativa, ilusión, anhelo –y lo que queramos agregar- su confianza en la opción que representaron los candidatos del partido tricolor.
Pero la historia no termina ahí, vendría el gran reto de construir día con día la LEGITIMIDAD DE EJERCICIO, la de adeveras, la que puede constatarse en cada acción, cada palabra, cada medida política, cada iniciativa, cada actitud de los legisladores, y que difícil y extenuante hay que reconocer nos ha resultado traducir la legitimidad de ejercicio para los que somos representantes del pueblo de Morelos, en acciones que la ciudadanía a quien representamos pueda percibir como actitudes congruentes y consecuentes.
En su momento, manifesté mi desacuerdo por su decisión de ausentarse cuando había una sesión ordinaria del pleno programada, a pesar de que nuestra normatividad interna señala con puntualidad que las actividades partidistas no serán causa justificada para faltar a las sesiones, ante ello, es fácil en la condición de mayoría cambiar el día de la sesión.
Y se pueden señalar todos los beneficios y bondades obtenidos de la participación de los diputados priístas en el festejo nacional por el aniversario de su partido, no tengo porque poner en duda, es su derecho, tenemos también como autoridades y representantes emanados de las filas de un partido político cual sea, ciertos derechos y obligaciones, el no desvincularnos, y apegar nuestra actuación a los principios, programa de acción, y base ideológica del partido al que pertenecemos, es parte también de nuestra responsabilidad.
La situación es tener claridad en el momento, saber cuándo debemos dar prioridad a nuestra función que debe estar al servicio de la sociedad y para abonar a la funcionalidad que representa el Congreso del Estado como Institución, y cuándo debemos ponderar nuestra actividad político-partidista, y en ello sustentaba yo la crítica realizada en los primeros días del mes de marzo pasado.
Considero que el evento, no debía llamar más la atención, porque al final la sesión reprogramada finalmente se desarrolló, se desahogaron los puntos del orden del día y no habría pasado a más, de no ser por lo que al inicio del mi reflexión se señaló, la gestión que se realiza para el reembolso de los gastos efectuados por los diputados priístas en su viaje a Zapopan Jalisco con motivo del festejo por el 81 aniversario de su partido político.
No dudo en absoluto de la importancia que significó su asistencia al encuentro nacional en su calidad de representantes del pueblo de Morelos emanados del PRI, pero, les preguntaría sin buscar confrontación alguna, ¿No es acaso un EXCESO solicitar, pedir, exigir el financiamiento del recurso púbico que administra este Congreso para cubrir los gastos referidos? ¿No parecería el colmo a la ciudadanía en una condición crítica económicamente, el que se destinen cientos de miles de pesos que debían tener otro destino, para financiar sus actividades partidistas? Son algunas preguntas.
De verdad, podría considerarse justo erogar la cantidad que ha sido solicitada, sin pensar en que estamos llamados y en consecuencia debíamos estar OBLIGADOS a ejercer nuestra posición con estricta austeridad y medianía, en respuesta a todos los votos depositados en el proceso electoral de julio pasado, en correspondencia con la confianza puesta en manos para actuar responsablemente.
Y también hay que tener claridad, y la tengo, el monto solicitado podría con relativa facilidad ser aprobado, otorgado, cobrado, por los legisladores que demandan el pago. Claro, que el tener la condición de mayoría que el PRI ostenta, tiene sus naturales ventajas, la concesión de ciertos beneficios con la anuencia u omisión de otros, lo es sin duda, pero mi llamado Diputado Coordinador, es respetuosamente a ejercer la conducción desde la Junta Política y de Gobierno de manera responsable, de mayoría priísta consecuente con las necesidades y prioridades del pueblo al que decimos representar, por ello también el exhorto a revisar, de manera eficiente, eficaz, objetiva y transparente, el rubro que se destina a los gastos de representación para que como legisladores morelenses acudamos a actividades legislativas convocadas para el buen trabajo en las comisiones que integramos.
Como poder legislativo que somos, poder revisor de la administración de los recursos públicos de los otros, estamos doblemente obligados a realizar un manejo responsable y transparente de los recursos del erario público que nos corresponde ejercer, y conviene recordar, esos recursos se componen en su gran mayoría por los impuestos pagados por la ciudadanía, seamos pues, no solo un ejemplo sino un buen ejemplo para estar en condiciones de exigir el manejo responsable del dinero público a los otros.
Sin otro particular, agradezco la atención prestada reiterando mi respeto.
C o r d i a l m e n t e
Dip. HORTENCIA FIGUEROA PERALTA
Integrante del Grupo Parlamentario
del Partido de la Revolución Democrática
c.c.p. Diputados integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional.- para su conocimiento.
c.c.p. Diputados integrantes de la Junta Política y de Gobierno del Congreso del Edo. de Morelos.- para su conocimiento.
c.c.p. Archivo.